Quizás un día estos artículos se conviertan en un libro, o quizás solo sean artículos, que entre vuelo y vuelo, País y País se fueron formando, historias, relatos o quizás nunca salgan de mi ordenador, a mi esposa le encantaría que efectivamente se convirtiera en un libro, siempre me lo dijo, hablando de ella, les contare que es una Argentina hermosa, claro al decir Argentina seguro que muchos estereotipos se cruzaron por su mente, carácter duro, bonita pero de mal genio, cariñosa pero no siempre, bueno yo no creo en los estereotipos y más desde que vivo encima de un avión visitando culturas día sí y día también, pero en el caso de mi esposa acertaron, hermosa como pocas, bonita y lo sabe, pero mal genio y gritona, me tiene prohibido que hable con la maestra de mi hijo, Luca el mayor, me dice que si me atrevo a ir hablar con ella y decirle todo lo que pienso, esa noche y alguna más, dormir en el sofá, y es que tiene razón, si le dijera lo que pienso, no solo dormiría en el sofá, sino que seguro, que a mi hijo que no tiene culpa de tener al padre que tiene, lo echarían de la escuela al día siguiente y eso sí sería un problema, pero es que en el fondo, escribo esto pero pienso, si es que tengo razón, a ver, hagamos una prueba yo les cuento y ustedes terminan declinándose por uno u otro.
Mi hijo es una luz como dicen en Argentina, es buenísimo en matemáticas, siempre saca 5 que es el 10 español, pero en Panamá, donde vivimos, la máxima puntuación es 5, porque?, no tengo ni idea, pero es así, bien, en matemáticas saca 5 cada vez que quiere y sin estudiar, la verdad es que se le da bien, seguro que en el futuro termina siendo un buen ingeniero, en cambio Geografía la odia, nunca le gustó, pero ahora, que a su corta edad ya ha vivido en 3 países distintos y claro ya se había aprendido de memoria los ríos y montañas Españolas y después tuvo que borrarlas y aprenderse las Argentinas, ahora le pedimos que se aprenda las Panameñas y claro, ya está harto y eso hace que las pocas ganas que le quedaban para estudiar, se pierdan en el primer suspiro, así que siempre va justo en la materia, muy justo. El otro día me entrega un examen de Geografía , su mirada delataba poco orgullo y algo de vergüenza, me espere lo peor, pero al ver la nota, mis ojos se abrieron como platos, un 3.6, que en Panamá siguiendo su métrica es aprobado justo, pero aprobado al fin, y yo exclamé BIEN!!!, lo conseguimos!!!, es Geografía hijo, porque esa cara de melón, si es un gran resultado, él ni me miraba, con los ojos clavados al suelo empezó a querer hablar, pero mi emoción no le dejaba, hasta que le pregunte pero, pero que???, la maestra, la maestra me ha dicho que me tengo que esforzar más.
Bien voy a detenerme un segundo antes de que corra hacia la escuela y asesine a esa…señora, a ver tengamos claro que Luca en matemáticas no baja del 4.8 nunca, y que en general sus evaluaciones son mucho mejores que las mías, pero el problema no es su rendimiento, el problema es que exista alguien que piense que un niño de 10 años o de cualquier edad, pueda sacar un 5 o 10 o 100 o la máxima puntuación dependiendo del país de cualquier materia y en cualquier momento, eso es irreal, mi hijo tiene compañeros que los padres castigan a sus hijos si sacan evaluaciones inferiores a 4, eso, no es exigencia, eso, se llama en mi vocabulario formar a frustrados que van a ser toda su vida infelices por no poder ser gente normal, no existe persona en el planeta que sea excelente en todo, existen personas excelentes en algunas cosas o que tiene ciertas habilidades y han sabido aceptarse y trabajar o vivir con ello, lo que la maestra de mi hijo no sabe, es que yo también soy docente, pero en mi caso de adultos, que cursan maestrías y que esas frustraciones y paradigmas los están llevando a la mediocridad y a la eterna justificación, especialistas en buscar culpables y 0 soluciones, especialistas en decir mucho y hacer poco, porque ese es a la postre el mensaje que les damos, si les hacemos creer que siendo humano no basta, que debes ser perfecto como una maquina de ultima generación y claro, cuando descubrimos que no lo somos, empezamos a apuntar a fuera buscando culpables por ese motivo, empezamos a copiar a todo el mundo al mandar un Mail para que quede probado que yo hice lo que me correspondía, no entender el todo, sin colaborar, y claro, visto así, es mejor que no hable con la maestra de mi hijo, esta vez le haré caso a mi esposa, que si me ha aguantado 14 años, será porque es más sabia de lo que creo.
